Bajo el mismo techo

Una sátira sobre el matrimonio 

y la convivencia 

que se queda a medio gas

Tenía ganas de ver esta comedia protagonizada por dos grandes actores como Silvia Abril (la mejor comediante de este país) y Jordi Sánchez, ya ellos y la premisa que se plantea, me llamaban mucho la atención.

 La película tuvo un moderado éxito en el momento de su estreno (no esta siendo un buen año para el cine español... y es culpa de la oferta, que nadie se engañe), y la crítica no fue muy benévola con ella, que digamos. Y es extraño, ya que estamos ante una sátira sobre el matrimonio y todo lo que ello conlleva, con un punto ácido, y como crítica de la sociedad actual. Vamos, lo que le gusta a los críticos.

Yo creo que la película tiene puntos interesantes y el reparto está por encima de la media, pero es cierto que la película se acaba quedando en tierra de nadie, y más por su horrendo final, que no destriparé. Pero como siempre, vayamos por partes.

La dirección no es nada del otro aquel, pero tampoco resulta mediocre, quedándose en correcta, sin más, que es lo que suele ocurrir casi siempre con la comedia española. Por otro lado, el guion tiene un punto crítico y con mucha mala baba que funciona. También hay que reconocer que estamos ante un remake "a la española" de "La guerra de los Rose", algo que, por cierto, la película no oculta, ya que hace mención a aquella.

  

En cuanto a los personajes, resultan interesantes, aunque podrían haber dado más de si, y hay un mensaje feminista que se queda un poco en tierra de nadie, y más cuando uno se fija en las dos partes y en revelaciones hacía el final de la cinta. Tampoco nos vamos a engañar, el guion no es ninguna maravilla, pero tampoco provoca vergüenza ajena, y tiene apuntes curiosos y rescatables. Lástima que no se hayan sabido explotar correctamente.

 

En cuanto al reparto, tenemos a dos grandes protagonistas, con un Sánchez que vuelve a demostrar que puede llevar una película como protagonista (suele ser lo mejor de sus películas), y una Abril que vuelve a confirmar lo buena actriz que es (aparte de comediante), pero, cuya faceta cómica no está bien exprimida en la cinta, y solo aparece en momentos puntuales, quedando bastante desaprovechada su vis cómica con un papel más serio de lo deseado.

 También destacar a un Daniel Guzmán que se lo pasa en grande, y que debería hacer más papeles cómicos. El resto del reparto, cumple, sin más.

En conclusión, estamos ante una comedia (anti)romántica, con elementos interesantes y dos grandes protagonistas, pero que se queda a medio gas, y en una declaración de intenciones. No obstante, podría haber sido peor, y traernos una comedia del montón que te deja peor de lo que estabas, como suele ocurrir últimamente. No es el caso, y se agradece. Pero viendo los elementos con los que contaba (y las pretensiones que tiene), se trata de una comedia fallida. Otra vez será.

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