Sin título.
Miedo a las noches largas,
frías, interminables de invierno.
Miedo a encontrarte,
porque significa volver a tener miedo:
el miedo que mi inunda cuando partes.
Miedo en los huesos, en las sienes.
Bajar de nuevo la montaña rusa.
Miedo que te hiela, que te anula
el miedo a seguir adelante
por temerle al miedo.
Miedo a la muerte y todo abandonarlo
y paradójicamente, miedo a seguir viviendo.
Miedo a la guerra, al sufrimiento
y al sufrimiento por tenerle miedo.
Nieves
http://elrincondemnieves.blogspot.com/2012/01/sin-titulo.html
Hola Angel, gracias por compartir. Veo que tu blog comparte entradas de otros sitios. Muy generoso por tu parte. Gracias de nuevo y me quedo por aquí. Besos.
ResponderEliminarDe nada Nieves, es un placer poder dar cobertura a los que ampliáis el panorama de las letras y el pensamiento en la red. Mil besos
EliminarEl miedo siempre galopa en nuestra mente y forma parte de nosotros en algún momento de nuestra vida..
ResponderEliminarDejemos el miedo a un lado y vivamos todo lo intensamente que podamos.
Besos y susurros cálidos